¿Por qué El Madrileño sabe tanto de publicidad si estudió filosofía?

ANECDÓTICO

11/2/20252 min read

No sé si alguna vez llegaremos a coincidir.
Espero que sí, pero de momento me conformo con una de sus mejores entrevistas.
En ella, Pucho reflexiona sobre el proceso creativo con una claridad poco habitual.
Link al episodio por si te da pereza leer: ttps://
https://lnkd.in/dnXBmgNU

No habla desde la inspiración romántica, sino desde la estrategia creativa que ha ido construyendo con los años. Su método para encontrar ideas recuerda a Cortázar: “Andábamos sin buscarnos, pero sabíamos que andábamos para encontrarnos.”
En su caso, las ideas llegan sin aviso, pero cuando aparecen, hay que perseguirlas hasta las últimas consecuencias. Hay que ejecutarlas en le momento porque aunque el concepto dure mañana los matices no serán los mismos.

También afirma que su trabajo no depende de las cuatro o cinco horas que pasa en el estudio,
sino de sus treinta años de vida. Justifica que su innovación “ir a la vanguardia de sí mismo” es la consecuencia de que nadie se de cuenta de que en realidad no es un músico formado. Sin virtuosismo técnico, la “técnica” puede ser la idea.
El rendimiento puntual es solo el resultado de una acumulación de experiencias. La sesión es un día; el oficio, una vida entera.

Industria y artesanía no son opuestos
En la industria musical aprendió la disciplina de terminar: entrar al estudio y salir con un tema hecho. Combina esa forma mecanicista que usan muchos artistas mainsteam de producción con lo artesanal.
Lo popular no es superficial
Una línea es recordable cuando es simple y verdadera. De ahí el valor de “lo popular” bien entendido: accesible en la forma, profundo en el fondo.
Una frase sencilla, si es verdadera, puede quedarse a vivir en la memoria colectiva. “Tú me dejaste de querer cuando más te necesitaba.”
La cultura que trasciende acaba siendo legado. Cuándo una marca deviene genérico (Kleenex, Chupa Chups), hay impacto cultural. En creación, dejar algo que permanece en el lenguaje común es un indicador de alcance real.

Utiliza Saber “lo justo” para romper una regla sin destruir la canción. La ignorancia total no sirve; el atrevimiento consciente te abre más puertas.

En el fondo, El Madrileño aplica la misma lógica que un buen publicista: observar, sintetizar y traducir emociones comunes en un lenguaje simple y universal.

Quizá por eso, aunque estudió filosofía,
entiende la creatividad mejor que muchos que hicieron un máster.